Arquimesa catalano-aragonesa con marquetería de «piñonet» o «grano de arroz» de boj, con decoración vegetal en zarcillo. En el siglo XVIII se redecoró en su totalidad estucándose y plateando con motivos de rocalla los laterales y el frontis. El reverso de la tapa se policromó con jaspeados de colores; se incorporó una cornisa mixtilíniea y se redistribuyeron los cajones.